Los espacios de representación LGBTQ+ son vitales para garantizar la visibilidad y la participación de las personas LGBTQ+ en la toma de decisiones y la creación de legislación y políticas públicas que beneficien a nuestras poblaciones. Sin embargo, es crucial comprender que estos espacios no se crearon para ser ocupados por “aliados” o personas que no formen parte abierta y activamente de la comunidad LGBTQ+.
Las cuotas arcoiris y las acciones afirmativas tienen como objetivo principal dar acceso, visibilidad y voz a personas LGBTQ+ a espacios de toma de decisión y puestos estrategicos. Permitir que los “aliados” ocupen estos espacios es paternalista y equivale a negar la singularidad de las experiencias de vida LGBTQ+ y socavar los esfuerzos por la inclusión y la representación genuina de nuestras poblaciones.
Es importante entender que usurpar un espacio de representación LGBTQ+ constituye una forma de violencia política. Por más solidario que sea un “aliado”, al usurparle a la comunidad LGBTQ+ su lugar y su voz en la toma de decisiones, perpetúa la invisibilización y violencia institucional contra nuestra comunidad, instrumentaliza y capitaliza nuestra lucha colectiva y niega el reconocimiento a nuestras luchas y necesidades específicas.
Resulta especialmente indignante y alarmante observar cómo algunos partidos políticos, que históricamente han obstaculizado sistematicamente el avance de los derechos LGBTQ+ y promovido el odio, la discriminación y el miedo moral contra nuestra comunidad, ahora buscan apropiarse de los espacios de representación LGBTQ+ usurpando candidaturas de accion afirmativa para personas LGBTQ+ e instrumentalizando nuestra lucha por la igualdad de derechos con propósitos partidistas.
En este sentido, es fundamental defender la integridad de los espacios de representación LGBTQ+ y garantizar que sean ocupados únicamente por personas que abierta y activamente pertenezcan a nuestra comunidad y que demuestren acuerpar de manera genuina las identidades, orientaciones, luchas y necesidades de nuestra comunidad. La participación de aliados importa, pero no deben ocupar espacios que pertenecen a la comunidad LGBTQ+. Solo así podremos avanzar hacia una sociedad más inclusiva y justa para todas las personas, independientemente de nuestra orientación sexual e identidad de género.
Mérida, Yucatán
Marzo 2024